La Financiación Colectiva (también conocida como La Microfinanciación Colectiva) es un concepto alternativo de recaudación de fondos nuevo y en desarrollo que reúne a los medios sociales y el financiamiento. Con la Financiación Colectiva, los empresarios logran extender el nivel de la comunicación con la multitud (también conocido en inglés como “crowd”). De hecho, normalmente, unas porciones de esta multitud suelen ser los siguientes: sus amigos, sus clientes y colaboradores e igualmente utilizan la red social para obtener la financiación necesaria. La idea consiste en la cual mediante una gran cantidad de pequeñas sumas de dinero o micro-créditos puede tomar el lugar de uno o dos grandes inversores o patrocinadores.
Los empresarios crean una campaña de financiación colectiva o microfinanciación colectiva (por lo general, se utiliza un medio con contenido por escrito y de vídeo) y se publica el proyecto a través de un sitio web o una plataforma virtual de financiación colectiva. La campaña ofrece información básica que pone en marcha una nueva idea de negocio o creación empresarial, la cantidad de dinero que están solicitando, para lo que se va a utilizar tal dinero, y lo qué recibirán en cambio de su inversión los contribuyentes (o inversores). Las mejores campañas son aquellas que inspiran a las personas a decidir donar o invertir dinero. La plataforma de la financiación colectiva toma típicamente una cuota del 3% al 10% del dinero recaudado. CrowdsUnite es un recurso de revisión de los sitios web que ayuda a diferenciar entre los varios tipos de plataformas de financiación colectiva.
Hay dos tipos principales de financiación colectiva basada en recompensa o capital—equidad que se enumeran aquí:
La Financiación Colectiva Basada en la Recompensa es la forma más común, popularizada por los sitios web como Indiegogo y Kickstarter (estos dos enlaces están disponibles en español). Los empresarios solicitan contribuciones financieras a cambio de recompensas, esas recompensas podrían incluir una nota de agradecimiento, una camiseta o un descuento al comprar el producto. A veces, los contribuyentes pagan por adelantado, para que se pueda desarrollar un proyecto o producto a través de un sistema de preventa. Debido a que no hay un rendimiento económico prometido, no aplica la Ley de Valores. Sin embargo, se aplican los derechos tributarios.
Solo con Kickstarter, más de $1 mil millones de dólares se han recaudado desde el año 2009 para proyectos que abarcan el cine, la música, la comida, el sector de los videojuegos y la tecnología. También, hay sitios web basados en las recompensas que se especializan en nichos de mercado, por ejemplo, Plum Alley para las mujeres empresarias, ioby para los proyectos basados en la comunidad y Pubslush que se enfoca en el área de la edición de publicaciones.
La financiación a través de las inversiones colectivas o las inversiones participativas funciona de la misma manera, excepto a cambio de obtener un rendimiento económico, ya sea una participación financiera en la empresa a través de las acciones de capital, los pagos de interés sobre un préstamo, o una parte de los ingresos. Crowdfunder, CircleUp y MicroVentures son ejemplos de las plataformas de financiación colectiva que utilizan el modelo de equidad.
Debido a que hay un rendimiento financiero prometido, las leyes de valores aquí entran en juego. La Comisión de Valores (conocida por sus siglas en inglés como, SEC) finalizó recientemente ciertas reglas bajo el Título III de la Ley “Jumpstart Our Business Startups” (conocida por sus siglas en inglés como JOBS) y en español, como “Reactivar Nuestra Creación de Empresas” para abrir oportunidades para todos los americanos a participar en la financiación colectiva de inversión o capital e invertir en pequeñas empresas. Anteriormente, el poder invertir en una financiación colectiva, sólo estaba disponible a los inversores acreditados, definidos como las personas con mayores ingresos anuales de $200,000 dólares o que poseen un patrimonio neto de más de $1 millón de dólares.
Actualmente, las personas que quieren invertir en una pequeña empresa que representa una opción promisoria y que ganan más de $100,000 dólares pueden invertir hasta $10,000 dólares de sus ingresos anuales; y si ganan menos de $100,000 dólares, ellos pueden invertir hasta un 5 por ciento de sus ingresos anuales.
Por otra parte, la financiación colectiva de bienes y raíces se ha puesto muy de moda en el mercado de la financiación colectiva. Si su negocio tiene un componente inmobiliario, por ejemplo, un edificio que quiere comprar, los sitios como FundRise, RealtyMogul y Loquidity ofrecen otra opción para lograr su meta de inversión.
Debe hacerse las siguientes preguntas: